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Valendir Sombraafín / Shen'dalar Canción de Runas

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Valendir Sombraafín / Shen'dalar Canción de Runas Empty Valendir Sombraafín / Shen'dalar Canción de Runas

Mensaje por Soridormi Dom Dic 17, 2017 5:31 pm

Shen'dalar Canción de Runas era un joven noble proveniente de Quel'thalas que asímismo pertenecía a los forestales. En esta organización, luchó en numerosas guerras y acabó consiguiendo el rango de comandante general de los Errantes en una proeza en la guerra contra los trols Amani del sur. Pero cosas nefastas esperaban a Shen'dalar, el cual mientras Kael'thas viajó a Terrallende se encontraba buscando por su cuenta una fuente de magia que sirviera a su pueblo, y se mantuvo muy ausente de la vida en Lunargenta y en la transformación de su pueblo en sin'doreis. Pero no fue solo, sino que abandonó Quel'thalas con la mujer de su vida, Au'thiel Sunglow, la cual era una Alta Adivinadora de la ciudad de la cual se había enamorado y juró protegerla y estar junto a ella mientras sus vidas eternas duraran.


Ambos enamorados viajaron hacia numerosos lugares, llegando hasta lo que se conocía como el Portal Oscuro, lugar que había sido atravesado por Kael'thas. Ambos estaban un poco asustados, pues no sabían que encontrarían al otro lado, pero se armaron de valor y cruzaron, dándose un beso antes de cruzar pues no sabían si llegarían al otro lado con vida. Lo hicieron, pero este fue el momento en el que toda su vida cambiaría para siempre...


Llegaron a Península del Fuego Infernal, lugar en el que se estaban asentando los campamentos orcos. En ese lugar ambos elfos se sentían muy bien consigo mismos... La magia vil que recorría el mundo les impregnaba de una sensación similar a la de la Fuente del Sol, pero Shen'dalar sabía que no era buena para ellos, aunque tal vez lo intuyó simplemente porque él era un forestal y renegaba del uso de la magia que no fuera la conocida por él. Sin embargo, su entonces esposa, Au'thiel, amaba esa sensación y a veces decía parar a descansar solo por poder sentir unos minutos más esa sensación.


Pasaron algún tiempo en la zona, buscando algo de utilidad en el yermo, hasta que finalmente en medio de Tormenta Abisal oyeron hablar en las posadas de la ciudad goblin de un demonio de gran poder, un demonio inquisidor de cuyo nombre no me acuerdo. La pareja corrió a buscar al demonio, el cual se decía que vivía al norte de la zona, en un pequeño islote del Vacío Abisal no muy lejos de Tormenta Abisal. Llegaron a la zona y con ayuda de las habilidades del forestal para moverse con agilidad y con la magia de la adivinadora para levitar llegaron hasta el islote... Pero lo que no sabían era que el demonio les estaba esperando...


Los inquisidores son demonios que utilizan ojos demoníacos para observarlo todo, y al parecer existían muchos por la zona, los cuales vieron llegar a la pareja. El demonio rápidamente les atacó con furia antes de que llegaran a la plataforma, provocando que la maga se desconcentrara al final y ésta cayera al borde del islote, del cual se agarró. Shen'dalar, sin pensarlo mucho, le agarró la mano y consiguió levantarla, pero al inquisidor le dio tiempo de conjurar un rayo gigantesco que lanzó sobre ambos. El elfo rápidamente saltó sobre el rayo recibiendo todo el impacto y cayendo al suelo fulminado, y con su último aliento le dijo a Au'thiel que huyera, lanzándole un gancho que utilizaba siempre para que se lanzara hacia la otra isla. Sin embargo, Au'thiel nunca supo que Shen'dalar seguía vivo, pues éste se convirtío en un elfo de la noche el cual fue lanzado por el demonio al vacío y con suerte cayó en Tormenta Abisal.


Varios años más tarde, la elfa ya vivía en Quel'thalas acostumbrada a usar magia vil y convertida en Sin'dorei, mientras que el elfo se mudó a la ciudad de Darnassus el cual era su único posible hogar. Vivieron años por separado, la elfa llorando la muerte de su amado, y el elfo llorando la fortuita separación, aunque no era posible que se volvieran a unir. Uno pertenecía a la Alianza, y la otra había visto forzada su inclusión a la Horda, además, lady Sunglow jamás reconocería al elfo, el cual se había renombrado a Valendir Sombraafín, en honor a lo que él buscaba ser, afín a la sombra, afín a desaparecer y no seguir existiendo.


Pero Valendir siguió fijo en su futuro... Estuvo numerosos años investigando sobre el demonio inquisidor y descubrió que si le derrotaba sería capaz de volver a su forma. Pero no sería tan tonto de estar en el mismo sitio... ¿verdad? Y así era, Valendir viajó a la misma isla y ahí ya no se encontraba el demonio... ¿Pero dónde estaba? Era una pregunta que recorría la mente de Valendir... Pero volvió a Azeroth y se dispuso a investigar. Pero antes de poder continuar con si investigación llegó a sus oídos la guerra que estaba ocurriendo en Gilneas contra los renegados y se dispuso a combatir en ella. Los renegados eran amigos de los elfos de sangre. Tal vez allí encontraría a su amada y entonces podría intentar hablar con ella... Pero no fue así, y luchó contra ellos dándolo todo, hasta que consiguió méritos en el ejército gracias a eso y el nombre de Valendir Sombraafín fue conocido por la Brigada de Gilneas.


Al finalizar la guerra, Valendir compró una baronía en la zona de Gilneas y se dispuso a vivir allí como un noble. Pero entonces ocurrió lo de la coronación de Cringris en la que descubrió lo de la mafia. Él junto con Lia Acton, Shinru Magalan y Dreker, a los cuales conoció en la coronación, formaron un grupo conocido como las Sombras de Gilneas, el cual con el permiso del rey, se encargarían de limpiar Gilneas de la mafia. Aunque el destino hizo que casi todos ellos murieran, dejando a Valendir en soledad de nuevo... Aunque entonces conoció a Namera Alma Argenta, a la cual estima muchísimo y en la cual piensa bastante, pues le recuerda mucho a Au'thiel. También conoció a Agural y a Dulvor, hermanos dragones del Vuelo negro, a Zyra, una elfa muy joven, a Sakura, la cual desapareció hace tiempo, a Steven y a Aelae, dos piratas, uno de ellos maldito por una Sombra la cual es una de sus mayores prioridades, y a Samuel, al cual a pesar de que no son los mejores amigos, no le desea nada malo ni se llevan mal.
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